Empezamos con un paseo en kayak que incluía servicio de vigilancia, muy importante para no perder a ningún miembro de la expedición.
Aquí reunidos para escuchar las explicaciones del monitor antes de salir a practicar kayaking, unos con más salero que otros.
Por nuestra parte deciros que nos lo pasamos muy bien y agradecemos a nuestros anfitriones el ágape
por partida doble que nos ofrecieron (no se si alguien cenó ese día, nosotros no). Que sigais disfrutando de vuestro coqueto rinconcito.
4 comentarios:
Nosotros nos unimos a los agradecimientos a la pareja anfitriona que nos hicieron pasar un día estupendo a base de deporte y comida (la combinación perfecta).
Por mi parte, a pesar de mis pintas de "cateto a babor", disfruté como un enano remando por el pantano.
Y de la comilona ni te cuento...
¡Felices vacaciones al que le toque! Nosotros hasta agosto nasti de plasti.
Una pena que no hubiera habido cuatro o cinco grados menos para haber estado más a gusto.
Como Top 5 del día, incluyo:
1- El nivel de los kayakeros, impresionante.
2- La indumentaria completa de Nacho y el gorro de Juan Carlos.
3- La tarta de cuajada y, según me dijo Sagga, los espaguetis.
4- El porte aristocrático de la madre-abuela con su paraguas-parasol.
5- Y por supuesto, la raqueta matamoscas y -está por ver- avispas también.
Je, je. Fer y sus listas. ¡Vaya nivel de fiestas de cumpleaños que estamos alcanzando!
Yo volví emocionada. Me encuentro doble mejor después de hacer deporte y comer bien. Tan bien que tampoco cené. Y el kayak, estupendo. Me quedé con las ganas de que no sea ésta la última vez.
No confesaré, aunque me presionen, por qué motivo hasta el miércoles no me podía mover del sofá.
También me lo pasé pipa, tengo que deecir que echaba de menos una excursión familiar y si hay una segunda Kayakada puede que intente suoperar mi miedo al monstruo del pantano de la Sotonera y me anime a remar. La comida nos gustó mucho y la post-comida también. Doy un 10 a la Organización y otro a la respuesta del personal.
Publicar un comentario