lunes, 23 de septiembre de 2013

Detalles de una habitación histórica


Aquí va un recuerdo para un habitáculo que se lo merece: una de las dos habitaciones del final del pasillo, antaño dormitorio doble en el que todos hemos dormido alguna vez seguro, y que hoy hace las veces de pequeño salón de estar con TV.

En la instantánea, nos tenemos que quedar con los siguientes detalles:

1- Las ventanas rosas, que yo no he visto en ninguna otra habitación del mundo (ni en las de Alaska y Mario). Ojo, con el cogote de la lamparita también de rosa para hacer juego.

2- Los muñequitos que pueblan la habitación, creo que se pueden contar hasta 7.

3- Las plantas, para que los que duerman respiren bien por la noche.
(Por estos tres primeros puntos, diría que recientemente había sido habitación-dominio de Elena.)

4- Los legendarios secreteres, aquí ya despojados de su puerta con llave.

5- Las fotos de famosos guapos: una constante a lo largo de la historia de esta parte de la casa. En este caso, Paul Newman, Humphrey Bogart (que no es un guapo al uso pero bueno) y Robert Redford.

6- Los tomos de Salvat. Muchos usamos alguna vez esas cintas para aprender inglés, ¿pero alguien lo hizo entero?

7- Y por último, por supuesto, mencionar a ese matrimonio bien avenido durmiendo en camas twin pero bien juntas (no había sitio para más): Sergichi con su habitual expresión de protagonista de "Entre pillos anda el juego" y Nacho, con pijama de señor. Y, eso sí (esos pelos delatan), ambos con pinta de haber dormido diez horas a pierna suelta y sin ningún problema de conciencia. ¡Qué tranquilo y a gusto se duerme de pequeño!